CALIFORNIA, EE.UU 24/FEB/2014
El Staples Center, casa de los Lakers, fue testigo de un histórico capítulo en la NBA. Jason Collins hizo historia al jugar con los Brooklyn Nets su primer partido esta temporada y ser el primer profesional abiertamente homosexual que lo hace en la NBA.
El hecho se dio en el partido entre Lakers y Nets, que fue ganado por los visitantes por 102-108. El desempeño de Collins estuvo alejado de ser una gran actuació, pues su participación se resumió en 11 minutos en los que no logró ningún punto, capturó dos rebotes —uno ofensivo y otro defensivo—, recuperó un balón, perdió dos y le pitaron cinco faltas personales.
Sin embargo, Collins tiene un gran mérito ya que convirtió un partido sin trascendencia entre dos equipos perdedores, especialmente para los Lakers, eliminados de la fase final, en el foco de atención de la jornada dominical de la NBA.
A falta de 10:28 minutos para el final del segundo cuarto, el entrenador de los Nets (Jason Kidd) ordenó que Collins ingresara a la duela del Staples Center, donde recibió una gran ovación por parte de los seguidores de los Lakers.
Nota y redacción: Adrián Alvizo Mendoza
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